Robinson Club Fleesensee

"El equipamiento del club nos ha convencido en muchos aspectos. Sin embargo, ni a los adultos ni a los niños nos convenció la piscina exterior declarada como "piscina". En el mejor de los casos es una amplia piscina infantil. Los que quieren nadar aquí o bien tienen que nadar por la noche cuando todo el mundo duerme o tomar el camino del lago. Esta última fue nuestra solución, ya que ni nosotros ni nuestros hijos queríamos meternos en una piscina exterior realmente pequeña entre decenas de turistas cubiertos de crema solar. En el lago, sin embargo, teníamos mucho espacio y éramos felices".

Situado justo en el borde del Parque Nacional de Müritz está el Club Fleesensee. Está ampliamente distribuido en un complejo de clubes de 66.000 m². La distancia a Hamburgo se da con 220 KM, entre Berlín y el club son 150 kilómetros. El viaje es posible con todos los medios de transporte habituales, para las empresas de los alrededores existe la posibilidad de pedir prestadas bicicletas y E-Bikes. Los alrededores ofrecen muchas oportunidades para la recreación deportiva, y las playas de los lagos también invitan a quedarse. El propio Robinson Club ofrece una piscina cubierta y otra al aire libre, pero esto no es particularmente apreciado por la mayoría de los huéspedes.

"Nuestros mellizos estaban entusiasmados con el cuidado de los niños, pero se quejaban de vez en cuando por la poca atención. Y aquí el Club Fleesensee podría mejorar realmente. Si hay muchos niños presentes, no es suficiente que dos estudiantes se encarguen del entretenimiento. Nuestro consejo: El número de supervisores debería estar basado en el número de niños. Así ningún niño se sentirá en desventaja. Nuestra mayor estaba bastante satisfecha, pero dos días también quiso pasearse sola. La yeguada vecina la había atraído y, por supuesto, la dejamos ir".

El ROBY Club es adecuado para los niños más pequeños en dos grupos de edad. Tanto los minis de 3 a 4 años como los maxis de 5 a 6 años son atendidos entre las 10 de la mañana y las 9 de la noche tanto en alemán como en inglés.

Los niños de 7 a 12 años encontrarán ofertas como R.O.B.Y-Sport, R.O.B.Y-Creative y R.O.B.Y-Fun. Los adolescentes también tienen cabida en Robinsonclub. Como "Robs", no sólo tienen una sala para jóvenes a su disposición, sino que también reciben regularmente ofertas deportivas y la oportunidad de participar en actividades conjuntas.

Se ofrece una gama completa de cuidados para los bebés Roby. Desde monitores para bebés y calentadores de biberones hasta cubos de pañales, cunas, sillas de paseo y un buffet infantil independiente, incluso los huéspedes más pequeños encontrarán sus vacaciones lo más agradables posible.

Todas las instalaciones están disponibles.

"La comida estaba bien. Pero el desayuno tardío no nos ha convencido. Por supuesto que todavía tenemos algo para comer hasta el Ultimo, pero si los huevos revueltos, por ejemplo, está vacío, no se repone a causa de unos pocos madrugadores. Por lo tanto, no tuvimos huevos revueltos para el desayuno en la mayoría de los días. Pero la oferta era abundante, sobre todo por las noches había diferentes platos y también había platos saludables en las mesas. Sin embargo, el ajetreo y las prisas en los buffets eran un verdadero desastre. Uno podía seguir pensando que la última comida había sido hace 24 horas".

Culinariamente, el Club Fleesensee es todo buffets. Tres veces al día existe la posibilidad de tomar el desayuno, la comida y la cena. Cuando hace buen tiempo, hay una terraza disponible, cuando hace mal tiempo se come en el comedor. Además, hay eventos regulares como la alfombra ROB semanal y un festival quincenal de comida callejera.

"¿En general? Unas vacaciones exitosas. ¿Repetirlo de nuevo? No, probablemente no. Pero esto no es culpa del club o del personal, sino de nuestra sensibilidad personal. En general era demasiado ruidoso para nosotros. Conocemos otros clubes Robinson que están construidos en complejos más grandes donde los veraneantes podrían dispersarse mejor. Otro punto de crítica es la pequeña piscina exterior. Y también la pista de baile, el famoso "tablero de ajedrez", por desgracia resultó ser demasiado pequeño. Sin embargo, el cariñoso personal, la simpática atención a los niños y la buena comida hicieron que pudiéramos disfrutar de las vacaciones y que volviéramos a casa bien descansados".